Llega el otoño y con el la reflexión, El otoño se enmarca con el dorado de las hojas que caen al suelo formando una alfombra crujiente al oído y evocante a la mirada.

Recordar el otoño es darle valor al fruto maduro, a la flor expresada en palabras lejanas, es arrancar al calendario los pocos días que faltan antes de concluir un año mas año.

Hay quienes llaman “Piel de Otoño” a las huellas que el tiempo ha dejado en nuestras vidas formando cicatrices de grandes epopeyas pasadas.

Otros llamamos “La edad otoñal” a la cosecha en que la vida te ha premiado con la experiencia y la sabiduría.

En octubre es cuando la luna luce más hermosa, tal vez quizás por que ella también es otoñal, tal vez por que ahora le toca a la luna lucir su blanca cara.

El viento que roza tu cara te hace sentir vivo, acaricia tus cabellos, se acongoja en tu pecho. Atrás quedar el calor de verano, la lluvia ocurrente cuando uno menos la espera.

El otoño es ver elevar las hojas en los brazos del viento arrullarlas en el espacio para dejarlas caer en cualquier instante .

Javier Fransoni